¡Tú decides qué consumes! / Tres sencillas reglas para cambiar el rumbo / Three simple personal rules to change the direction
Photo: Katja Kusche, 2011
Tres sencillas reglas personales para cambiar el rumbo del planeta:
1. Producir en tu casa al menos el 40% de lo que consumes (vegetales y animales, alimentos preparados, productos de limpieza, vestido). Entre más lo hagas, mejorará tu salud y sentido de pertenencia social.
2. Consumir un 50% de productos que se produzcan en la región. Entre más lo hagas, mejorará la economía de tu región y tu sentidos de identidad, responsabilidad y colaboración.
3. Consumir sólo un 10% de productos de otras regiones del propio país, o donde vives. Y del mundo. Siempre vale la pena reconocer la riqueza en la variedad del mundo, da claridad a nuestra propia cultura y promueve tu aceptación de los otros, así como el reconocimiento de que es la diferencia la que constituye un hermoso mundo, que no es sólo tuyo, nuestro.
Algunos, de cientos de beneficios posibles:
- Se reactivarían las economías regionales de todo el planeta.
- Bajaría el consumo, de manera significativa, de productos que tienen un costo exponencial para el planeta (agua, petróleo, y otros muchos).
- Se utilizarían técnicas de abono y cuidados menos agresivos con las plantas y la tierra porque los productos se consumirían cerca y pronto.
- Las regiones se interesarían por recuperar y cuidar los recursos naturales regionales.
- Las especies volverían a sus hábitats y se recuperarían lentamente sus poblaciones.
- Se encontrarían modos de producción no dependientes y sustentables.
- Los costos de los productos se equilibrarían: barato lo cercano, costoso lo lejano.
- Se frenaría la migración de los países pobres hacia los ricos.
- Los países pobres reactivarían el trabajo en el campo.
- Nuevamente se diversificaría la mano de obra.
- Los países pobres elevarían su PIB.
- Renacería la vida artesanal y cultural de las regiones, que enriquecen al mundo entero.
¡Tú decides, qué consumes!
Three simple personal rules to change the direction of the planet:
1. Produce at home at least 40% of what you eat (plant and animal foods, cleaning products, clothing). The more you do, the more you improve your health and sense of social belonging.
2. Consume 60% of products produced in the region. The more you do, the more you improve the economy of your region and your sense of identity, responsibility and collaboration.
3. Consuming only 10% of products from other regions of the country, or where you live, or of the rest of the world. Always worth acknowledging the richness in the variety of the world, gives clarity to our own culture and promote your acceptance of the Other, and the recognition of the difference the one that give the most richness of our world that is not yours, or mine.
Some hundreds of possible benefits:
* The reactivated regional economies across the globe.
* Consumption would go down, significantly, of products that have exponential cost to the planet (water, oil, and many others).
* The techniques used fertilizer and less aggressive care and land plants because the products are consumed by and soon.
* The regions would be interested in recovering and taking care of regional resources.
* Species habitat again and slowly recover their populations.
* They would be dependent modes of production and sustainable.
* The costs of balancing products: cheap near, so far expensive.
* It would slow the migration of poor countries to rich.
* Poor countries reactivate the work in the field.
* Again diversify the workforce.
* Poor countries would increase GDP.
* Reborn craft and cultural life of the regions, enriching the whole world.
You decide, what to consume!
0 comentarios